Entre la gran mayoría, por no decir todas, las listas de propósitos de año nuevo se encuentra la vuelta al deporte o incluso en algunos casos, empezar. Pues bien, debemos ser conscientes de que toda actividad física o deporte puede provocar lesiones, y todas ellas pueden ser prevenidas.
El primer paso para esta vuelta o empiece de actividad física, es conocer nuestro estado físico. Es imprescindible saber en qué punto estamos, ya que el primer día al empezar una actividad, tendemos a lanzarnos a ella esforzándonos más de la cuenta debido a la motivación por la novedad y los grandes efectos que va a tener en nuestro cuerpo, y ese es el principal error. La palabra clave es progresión.